son los kilómetros que marcaba el relojito este mediodía. Es la primera vez que he superado las dos cifras esta campaña, y por lo que está sobre el papel, este es solo el comienzo. En cuanto a la crónica de la salida, decir que el león se comportó como tal (la bandera es la de flandes, que le viene que ni pintada al león ya que rueda como un belga del norte, no nos olvidemos de los Eddy Planckaert, Johann Museew, etc), pues si, el León se pensaba que era la reencarnación de Eddy Planckaert y tiraba como si la vida le fuese en ello, yo le gritaba ¡no te cebes!,¡A donde vas!,¡Para, para!, y el felino erre que erre, tenía entre ceja y ceja lo de dar pistón a fondo y vaya que si lo hizo, con dos salidas más como la de hoy podría apuntarme al IM de Lanzarote y presto a rayar las 11 h, ¡El León bajaría de las 10h!, aunque tengo que decir que el león a lo mejor tiene el calendario cambiado y piensa que Roth es en marzo. El Iván pinchó dos veces, algo que desmoralizaría a cualquiera, pero como es un cabeza dura terminó su periplo con la única secuela de las manos un poco tiznadas y un cabreo de narices, y el dirá lo que quiera, pero aguantó el chaparrón al pie del cañón ¡ojo con el Tiburón-Alien-Sarkozy!. La media de hoy fue a 27,3 y poco me parece porque tengo las piernas bastante afectadas. Sin duda las salidas de los domingos con el León ya no son las mismas que sin él, seguro que más de una cadena ha reventado ya, aunque no me quiero imaginar que el zorritus antigüensis reaparezca los domingos, porque con la afición de éste a los ataques y los palos indiscriminados yo acabaría en la UCI. La próxima semana (la 16ª) será más dura en cuanto al agua y a la carrera y el domingo serán 110 ó 120 km con los calimeros. ¡A entrenar caballeros!
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