Quedan menos de dos meses para Roth. A uno le entra un escalofrío, ya no hay vuelta atrás a no ser que fuerzas mayores lo impidan. Los chicos del IM Lanzarote estarán ya en la fase Zen, es decir, meditación y concentración. El León se debe estar afilando las uñas y los colmillos de dientes de sable, con mil y pico participantes habrá carne para repartir. Eso será un festín.
Espero que Agustín se haya adaptado a su nueva bici, bueno aunque a decir verdad, un triciclo le basta, solo hay que recordar el Volcano que hizo con una bici a la que nunca se había subido.
En cuanto a mis entranamientos, por ahora los voy llevando al 100%, el tiempo acompaña y el cuerpo va encajando como puede las horas y horas al sol. La ventaja de entrenar tanto es que un día puedes hacer 30 kilómetros más de lo que estás acostumbrado a hacer y te parece que te has comido un flan después de un banquete, es decir, entra solo. En cuanto a Iván, parece que va entrenando poco a poco, seguro que su cuerpo tiene memoria de los dos IM que se ha tragado por lo que no se le puede comparar con los novatos. A este paso la perra también participará.
2 comentarios:
Así es león! cada vez queda menos y se va más deprisa el tiempo. Lanzarote espera ansioso de ver si será bien digerido. ¡Ojalá me pueda dar un buen festín! ¡Lástima que no estés aquí para que puedas disfrutarlo! Aún así, estarás presente en mis pensamientos.
Mucha suerte con la operación de tu padre, ya ves que hay un factor X que siempre hace que la preparación de un Ironman no sea perfecta.
Publicar un comentario