
Sonó el pistoletazo a pesar del cabreo de Kenneth Gasque porque algunos chicos estaban por delante de la boya de salida, por cierto, no le entendía nada de lo que decía por el megáfono. Pues empezamos a nadar y yo relajado a tope, iba muy bien la verdad, a pesar del gentío, ha sido una de las ocasiones que menos roces y golpes he tenido en esa laguna. No sabía cómo lo estaba haciendo, pero mal, lo que se dice mal no del todo porque no me despisté como en otras ocasiones haciendo eses por la charca. Capté la movida cuando me veo en los boxes nada más y nada menos que a Agustín y por detrás de mí al mismísimo León. Flipaba. Podía haber acabado la prueba allí mismo y yo hubiera estado feliz pero la cosa podía mejorar más aún. Me dije que era hora de quitar el freno y mandarle caña, que mañana sería otro día, que me olvidara por un par de horas del IM del día 23. Así lo hice y subí hacia Soo pasando gente y Agustín a unos 500 m, iba acoplado y me sentía bien, en la bajada a Famara, el espectáculo era delicioso, como si fuera un rosario de ciclistas de punta a punta. Logré llegar hasta donde Agustín y Rayco y nos vinimos juntos, yo además desesperaba porque no conseguía enganchar con Iván (¿Cómo puede rodar así estando recién casado?) y había perdido de vista al zorritus, entre medias pasamos a Mateo y bajando para la T2 despegué unos segundos al Sr. Noval. Comencé a correr a ritmo bueno y justo en el primer giro de la carrera a pie trinqué a Iván y le dije ¿Cómo estás? jodido, respondió, vaya carrerón para reaparecer en la competición, así da gusto pensé. Tan jodido no estaba. El presi me dijo también "Salvi no está a la vista" y yo entendí "Salvi está a la vista" por lo que intenté acelerar el paso para pescar al más huidizo de los calimeros. Agustín sacó la casta y me pasó. Por cierto, Luis iba primero, pero a pesar de ser una pasada, como es algo habitual no le damos la importancia que tiene, Luis se salió, así de simple. Me encontré de frente, al fin, con Salvi y estaba detrás de mí, yo pensé que lo masacraría en este blog al llegar a casa después de tanto chasquido pero sacó la mano para chocarla con la mía, aceptando la derrota y eso me tocó la fibra sensible, casi se me sale una lágrima viendo como ese portento de la naturaleza aceptaba que mi volumen de entreno pudo con su agilidad y que en su carita llena de sal se dibujaba una sonrisa. Llegados a meta me puse a contarle a todo el mundo lo bien que lo había hecho y me di cuenta que a todo el mundo (o casi) le había ido bien ya que hasta el León, al que yo me imaginaba sufriría como un perro le salió una carrera más que buena para su volumen de entreno (eso es clase), nada más pasar la meta este felino sacó su habilidad comercial y negoció con todo quisque, ¡Casi le vende dos culottes Skinfit al Jammaer!, nadie se cayó ni pinchó y todos nos acordamos de Beneharo, que tenía que estar allí pero que una caída le dejó más guapo que antes.
Antes de cerrar este post, quiero darle las gracias a todos mis lectores. Lo hago por ustedes. Ciao.
2 comentarios:
Tú si que has demostrado clase y humildad.
Hicistes un carrerón y creo que el 23 de mayo lo vas a hacer mejor.
Allí estaré para verlo, animarte y seguirte, como lo hago con este blog.
La única pega es que me has tenido en espera desde anoche y toda esta mañana para saber tus impresiones de algo que ya imaginaba desde ayer.
Muchisimas felicidades Pascual, estas echo un crack. El año que viene espero estar en el vulcano. Sigue escribiendo tan bien que me lo paso pipa desde el pais de la pasta.
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