...y El León abandona temporalmente estas praderas para buscar presas que sacien su hambre triatlética. Se nos fue de viaje para pasar el puentazo en la isla de Beneharo y Cándido. Seguro que algo estará tramando. Al Zorritus lo deja solo en la piscina para que haga las series que le dejó encomendadas, no las que quiera sin el ojo avisor que le corrija los improbables defectos. Esta mañana, sin ir más lejos, estaba paseando con la bici por Agua de Bueyes cuando oigo pasar un coche y me saludan y oigo "Me voy a la piscinaaaaaa..." y no oí más porque iba como a 90 km/h. Era el Zorritus que iba para Las Playitas a calmar su sed de fartleks y puntos muertos, no me cabe duda, porque El leonis skinfitensis le dejó un papelito escrito con todas las sesiones que haría en su ausencia. Pero estoy seguro que como el zorritus es un alma libre se dedicará el fin de semana a perseguir conejos por el sur de la isla ¡Es que es un rebelde!
En lo que respecta a los entrenos todo va bien para las fechas en que estamos, es decir debo estar lento como una tortuga. Pobre de mi si sintiese que cojo la forma antes de abril o mayo, llegaría como un cartucho quemado a Puerto del Carmen el 23 de mayo.
Lo que si noto este segundo año de preparación para un Ironman es que asumo con bastante naturalidad los entrenos que antes me parecían una locura. Ahora la locura es una norma. Saludos a todos y abríguense.
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