Asamblea brutal

Vaya día, vaya asamblea. La jornada no ha defraudado, a veces se dice que corrida de toros de expectación es corrida de decepción. Hoy no. Además de tener una hornada de nuevos calimeros con mucho porvenir resulta que tienen características novedosas y muy provechosas para el club. Para empezar Teo que, sin empezar la temporada ya rueda 120 km a 29 de media, Enrique y Juanma con muchas ganas de aprender, Paco que corre como una gacela tanto una milla como una media maratón, y para rematar nuestro diamante en bruto: Iván (El gomero) que aparte de tener ambición y mostrar ganas de aprender y superarse es capaz de dejar al mismísimo León tieso como una tabla. Yo estaba en estado de shock, una y otra vez Iván arremetía en plena reunión contra los rugidos del felino, pim, pam, pim, pam y lo dejaba mudo, pim, pam, el chico de La Fuentita no reaccionaba, tal vez porque es más sabio que otros años, habiendo aprendido que uno es esclavo de lo que dice y dueño de sus silencios, el León se dio cuenta que no había nada que hacer ante el empuje de Iván que en más de una ocasión le amenazó con apretarle las tuercas y casi lo deja en la lona con un K.O. técnico. Así como lo leen, el felino parecía un gato persa sobre una alfombra aguantando las embestidas, y no solo eso, que se vayan sujetando los machos los chicos del top ten para cuando toque el triatlón de La Gomera, ya están avisados. La reunión tuvo más miga que la que les acabo de relatar, aunque parezca increíble, por un lado tendremos libertad parcial en el uso de equipaciones (Pablo casi tiene un orgasmo pensando en que podrá usar Skinfit) también se modificó el sistema de puntuación del ranking majorero y sobre todo porque desde las 8:30 hasta ocho horas después casi se me desencaja la mandíbula de reirme de las burradas que se decían en Los Estancos City, para rematar los costillares de Iván (El majorero) estaban de rechupete y la paella de Cándido idem. Somos unos afortunados.