Vaya con el vientito

Según Iván esto es normal, pero yo no recuerdo una racha tan nefasta en mucho tiempo. Este mediodía las palmeras del pueblo estaban dobladas como gimnastas rumanas en plena competición. Debido a factores externos no se si descansar o tomarme un refresco, bueno, a lo mejora cambio la bici para mañana y corro algo antes de venir cubierto de tierra de mi centro deportivo. Ya me estoy empezando a comportar como Agustín, o sea obsesionado por no perder entrenos y con sentimiento de culpa si los pierdo. El rodillo es una chuminada, solo sirve para que jubilados pierdan peso comiendo barritas adelgazantes de venta en farmacias, lo veo poco digno. La bici ni me la planteo, salir con ella sería una temeridad incluso con las ruedas sin perfil. Otro día será

P.D. (Escrito por la noche): Al final entrené cuando aflojó el vientito a eso de las seis. 12 km a pie y uno en la playa porque se hacía de noche y todavía me da el canguele por recordar el comienzo de la película Tiburón de 1976 (La chica de noche en el agua y empezaba el bicho a tirar de ella para abajo) ¿A que acojona?.